julio 04, 2008

Anónimos

El primero habla pausado, reconoce que ha vuelto a beber. El segundo, tras sus prominentes gafas, llora lágrimas de alcohol. La tercera, recatada y observadora, traga saliva y confiesa: bebo cuando los niños están en el cole. El cuarto, de inconmensurable pansa, se escamotea detrás de una risita nerviosa hasta que no puede más, cree que nunca podrá dejar el alcohol. Él observa ávido, espera su turno; si tuviera uñas, lo sabe, se las comería.
-¿Y? ¿Cómo fue? –dice el científico.
-Nada, che –responde el robot, cabizbajo–, no pude fingir, ya no sé cómo encajar en esta sociedad.

5 comentarios:

La Morsa a la Deriva dijo...

El robotito no se adapta. Pobre, pobre el robotito.
Che, si un día de estos nos vemos, te quiero comentar algo sobre el final...

Tomás Duhalde dijo...

Es una serie? Mac and Cheese??
Nos vemos en el pasillo.

malditas musas dijo...

Me sigue dando pena este robot... ¿este es hermano del payaso, no?

bso
musa

V a l e n t r i n i t y dijo...

entrañable este personaje que has creado mi kerido ruso cantante de boleros

V a l e n t r i n i t y dijo...

oh romeo romeo donde estás que no leo...
publique hombre!, o la que se pondrá el bigotito, seré yo!